_el fútbol, la paciencia y los buenos negocios.

Después de descubrir que el PCC no es un equipo de fútbol, y convencidos de que venderle un teléfono móvil de reviente al coleguita Marcola fue una idea lamentable, ganamos la selva y no paramos de correr hasta llegar a Venezuela, donde nos entrevistamos con el presidente Chávez para decirle que esta vez la jodió, porque invertimos todo nuestro resto en la fabricación de muñequitos de la mascota del mundial, Goleo VI, y no vamos a poder financiarle la compra de armamento. Nos pregunta si Goleo es ese león pelotudo con una remera blanca con el 6 en el pecho y si, es ese, entonces me parece que se van a fundir nos dice y nosotros, que ya estamos cansados de que los zurditos nos ojeen los emprendimientos, dejamos la tierra de Simón Bolívar y nadamos hasta la bahía de Guantánamo para avisarle a los muchachos que la corten con las astillas de bambú porque los de la ONU se están empezando a cabrear. Cuando llegamos, vemos que nuestros coleguitas musulmanes también están llegando al limite de su paciencia, y antes de que nos metan en la misma olla con aceite en la que van a meter a los guardias pasamos silbando para disimular y llegamos a La Habana, nos enteramos de que Fidel dijo que si le dan 900 millones de dólares renuncia a la presidencia, o algo parecido, y rápidos como somos para los negocios saltamos a México, cruzamos la frontera antes de que empiecen a construir el paredón que evitará que los mexicanos tengan que emigrar en busca de esos trabajos que no quieren hacer ni los negros, y que parece que son bastante mejores que vivir en un país presidido por el señor Vicente Fox, y nos vamos a la Casa Blanca a decirle a Litle Bush que nosotros por 450 le derrocamos a Fidel y le conseguimos el préstamo de Agüero para que le haga jueguito en el living de la casa. Al llegar, el portero nos informa que Litle Bush se enteró que unos científicos alemanes descubrieron unos monos capaces de planificar, y se fue a pedirles si no le prestan un par para que le asesoren a los generales que regentean la ocupación en Iraq, así que los va a recibir el Loco Cheney nos dice y nos recomienda que no levantemos mucho la voz porque el señor vicepresidente está preocupado: unos informes aseguran que los soldados que mandamos a Iraq están todos medio colifas. Entramos y encontramos a Cheney jugando con su navaja, nos dice que el, personalmente, entrevistó a los soldados y que le parecieron bastante normales, incluso superaron con éxito la prueba de "el león y la vieja". Antes de que nos explique en que consistía la prueba, y en puntas de pie porque el sonido de la madera rechinando lo pone violento, dejamos al Loco Cheney dispuestos a emigrar a Gaza y unirnos a la nueva fuerza de seguridad del ministro del interior palestino Said Siam, a la vista de que fabricar muñequitos para el mundial resultó una gilada, cuando nos enteramos de que en San Pablo pinto el negocio de venderle teles de plasma al servicio penitenciario y decidimos cambiar el rumbo y arriesgarnos. Total, si sale mal podemos hacer como Fujimori, que es uno que se hizo meter preso en Chile y después convenció a la Corte Suprema para que le fijara como fianza un sanguche de bondiola y un paquete de palitos.